La Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) y la Plataforma de Apoyo a las Víctimas del Terrorismo (APVT) han realizado, por sexto año consecutivo, una ofrenda floral en memoria de las víctimas del terrorismo en el monolito de Alderdi Eder en San Sebastián, donde han denunciado los últimos acercamientos de presos "sanguinarios" a cárceles vascas y han lamentado que el Gobierno central haya "pasado otra línea roja".

La presidenta de la AVT, Maite Araluce, y el presidente de la plataforma, Miguel Folguera, presidieron el acto, que ha comenzado con un minuto de silencio, y que ha contado con una nutrida representación institucional y política, entre los que se encontraban el delegado del Gobierno en Euskadi, Denis Itxaso, el alcalde de San Sebastián, Eneko Goia, así como los diputados forales socialistas y ediles del Ayuntamiento donostiarra del PNV, PSE y PP.

También ha estado presente una amplia representación del PP vasco, con su presidente Carlos Iturgaiz a la cabeza, acompañado de otros dirigentes de la formación popular como Laura Garrido, Raquel González, Iñaki Oyarzabal, José Luis Arrúe, o Mikel Lezama, entre otros.

En su intervención, Folguera ha agradecido la presencia de representantes políticos e institucionales, y ha resaltado que "hoy es un día duro" para las víctimas, con el anuncio del acercamiento de presos "terroristas sanguinarios", acción con la que, en su opinión, el Gobierno central ha "pasado otra línea roja" y ha hecho "algo que dijo que nunca iba a hacer".

Asimismo, ha denunciado la "equiparación de víctimas y verdugos", y ha subrayado que el dolor que sufren "nos lo han causado a nosotros, que nunca hemos querido ser víctimas del terrorismo", al tiempo que ha agradecido al alcalde de San Sebastián la iniciativa de colocar placas en memoria de las personas asesinadas en la ciudad.