Mi percepción sobre las víctimas del terrorismo cambió al conocer personalmente a Miguel Folguera, Ángeles Pedraza y Alfonso Sánchez. Antes de ese momento, mis referencias sobre las víctimas del terrorismo eran las que puede tener cualquier ciudadano de a pie, pero conocerles a ellos supuso para mi entrar en un mundo del que ya nunca más me voy a separar. Yo no soy una víctima del terrorismo, pero siento un total compromiso, solidaridad y apoyo hacia ellas, premisas que coinciden totalmente con la filosofía y decálogo de la Asociación Plataforma de Apoyo a las Víctimas del Terrorismo (APAVT).
Afortunadamente, hace tiempo que nuestro país no sufre el azote del terrorismo, pero eso no significa que tengamos que estar de brazos cruzados. ETA ya no mata, pero está presente en las instituciones, y la amenaza yihadista es constante. Es muy importante que recordemos a la sociedad qué ha sucedido en este país durante más de 50 años, tenemos que agitar conciencias y transmitir a nuestros jóvenes el verdadero relato. Hay que estar moviendo las conciencias constantemente para que el terrorismo no nos gane la batalle y, sobre todo hay que hacer llegar este mensaje a los jóvenes, y os aseguro que desde APAVT Madrid va a ser uno de nuestros principales objetivos.
Desde este puesto que nunca esperé recibir y que acojo con entusiasmo y cariño, quiero acercarme aún más a las víctimas del terrorismo, que no caigan en el olvido. Además, quiero intentar extender este deseo a toda la población madrileña que, aunque no sean víctimas, quieran formar parte de esta gran familia que es APAVT.
No deseo alargar más esta presentación, solo quiero deciros que estoy a vuestra disposición y que desde Madrid lucharemos con más ahínco aún si cabe por las víctimas del terrorismo.