El acto, celebrado en el Salón de Grados de la Facultad de Derecho de la Universidad del País Vasco, fue inaugurado por la consejera de Justicia y Derechos Humanos del Gobierno Vasco, María Jesús San José; la presidenta de la AVT, Maite Araluce; y la presidenta de la APAVT, Mónica Muñoz, quienes abrieron la jornada con un minuto de silencio en memoria de todas las víctimas del terrorismo.
Durante su intervención, Muñoz subrayó el compromiso permanente de APAVT con la memoria y la reparación, recordando que “recordar no es un ejercicio del pasado, sino un acto de responsabilidad” y que, por ello, APAVT seguirá impulsando junto a AVT espacios de reflexión que permitan visibilizar las demandas y necesidades de quienes han sufrido la barbarie terrorista.
La primera mesa de debate, centrada en la política penitenciaria respecto a los presos de ETA, contó con la participación de Montserrat Torija, directora general de Apoyo a Víctimas del Terrorismo del Ministerio del Interior, e Inés Soria, asesora del Gobierno Vasco. Ambas analizaron cómo las decisiones en materia penitenciaria influyen en la percepción de justicia y reparación. Soria remarcó el compromiso del departamento para que las víctimas no se enteren por los medios de comunicación de las progresiones de grado, consciente del daño que esto puede causar.
Para APAVT, este tipo de diálogos son fundamentales para avanzar hacia políticas que, además de ser ajustadas a derecho, sean sensibles al sufrimiento de las víctimas.
La segunda mesa reunió a las víctimas del terrorismo Aurora Intxausti y José de Jesús, quienes compartieron experiencias que evidencian cómo la revictimización sigue presente. Sus palabras recordaron que, pese al paso del tiempo, la herida emocional continúa abierta y las situaciones que reactivan el dolor siguen siendo una realidad para muchas familias.
En la tercera mesa, la productora María Luisa Gutiérrez y la víctima del terrorismo Lucía Ruiz reflexionaron sobre el papel de la cultura y la divulgación en la construcción de una memoria social honesta. Ruiz subrayó que cuando una obra audiovisual está tratada con empatía hacia la víctima “siempre ayuda a mantener el verdadero relato”, poniendo en valor el compromiso de los profesionales que trabajan desde el rigor y la sensibilidad.
La jornada concluyó con las intervenciones de Maite Araluce y Mónica Muñoz, quienes coincidieron en que continuar organizando actos como estas jornadas es esencial para que la sociedad no olvide, para que el relato de las víctimas siga vivo y para que los responsables paguen por sus delitos.
Desde APAVT, su presidenta reiteró la voluntad de la asociación de seguir impulsando iniciativas que fortalezcan la memoria, la justicia y la dignidad de las víctimas del terrorismo, pilares irrenunciables en la construcción de una sociedad verdaderamente democrática.